Funciones del deshidratador

Las funciones de un deshidratador

La ventaja si comenzamos a utilizar un deshidratador, es saber con exactitud con qué alimentos estamos trabajando, cuál es su calidad, origen y en qué fechas estamos realizando el proceso de deshidratación. Estos alimentos, además, pueden dar mucho vida en la cocina, ya que, en algunos casos, pueden ser guarniciones sorprendentes y, en otros, pueden integrarse o revolucionar, por ejemplo una simple ensalada puede convertirse en algo más, ya que puede tener diferente texturas, colores, olores y explosiones de sabores, en cada bocado, escalando el nivel de nutrición. Ahora, se ha convertido en un complemento ideal para elaborar platos de la “dieta cruda”.

Entre las grandes maravillas que podemos hacer podemos comenzar con frutas peladas, cortadas o rebanadas, eligiendo diferentes grados de texturas: desde laminas crujientes, chips o crackers hasta texturas blandas, así como numerosas verduras, las carnes deber magras, es decir sin grasa, para poderse conservar bien secas. La razón es que la grasa que no tiene agua, se oxida con el tiempo y emite malos olores.

También podemos elaborar snacks saludables para los niños triturando las frutas de tu preferencia (y alguna que otra verdura escondida para hacerlo mas saludable) con muy poca agua para formar un concentrado, extendiéndolo en las hojas paraflexx. Lo deshidratas, puedes cortar en laminas o con los cortadores de galletas puedes crear figuras divertidas para ellos.

Al deshidratar hierbas, se pueden ocupar para darle un toque a las sales, hacer un concentrado de estas mismas utilizándolas en el caldo de pollo sin ser dañinos como los comerciales por su alto contenido en sodio y potencializadores de sabores. Al hidratar las pastas, puedes utilizar tu selección favorita para darles sabor sin tener que agregar tanta sal… ¡todo lo que se te ocurra!

La deshidratación de los alimentos deberían ser implementada en cada hogar. Aprovechando los productos de temporada, elaborando un almacén. ¿No les ha pasado qué van al mercado y están por los cielos los precios? Ó Cuándo la economía del hogar se desestabiliza y se tiene que reducir el presupuesto de los alimentos… ¡Qué acertado es invertir en un deshidratador!

Es cierto que existen innumerables tipos de conserva tales como la congelación. Los alimentos se someten a cambios de temperaturas bruscos y extremos obligando a los productos a perder gran porcentaje de sus nutrientes. El agua se convierte en cristales de hielo, alterando la estructura molecular del alimento, motivo por el que una vez descongelados los productos pueden tener un sabor y consistencia distinta al del producto original. No se recomienda consumir alimentos que hayan estado congelados durante más de 6 meses.

Enlatado, hay que someter los alimentos a temperaturas muy altas para asegurarse de la no proliferación de bacterias ni esporas, con lo que hay cambios moleculares en todos los nutrientes. Los alimentos pueden mantenerse años en latas de aluminio con plastificantes en su interior, con la toxicidad que esto supone.

Salmuera y salazones, acidifican los alimentos.

Radiación: consiste en exponer los alimentos a rayos gamma o rayos X para destruir microorganismos, retrasar la germinación y la maduración. Falta información acerca de esta forma de conservar alimentos, que no goza de total aceptación.


Si deseas adquirir un deshidratador Excalibur por favor no olvides visitar la tienda oficial de Healthy Living Wares. Una forma segura y garantizada de hacer tu compra.

Deshidratador vs horno

El uso de un deshidratador

El deshidratador permite «cocinar» las preparaciones preservando los nutrientes y las enzimas de los alimentos.

¿Qué es un deshidratador y cómo funciona?

Los deshidratadores son aparatos eléctricos que funcionan con un ventilador, termostato y, algunos cuentan con temporizador. Gracias a la circulación de aire caliente, elimina la humedad o el contenido de agua en los alimentos. El agua es lo que hace que los alimentos se echen a perder o se deterioren, y sin agua, las bacterias y el moho no puede crecer.

Se pueden deshidratar todo tipo de alimentos: frutas, verduras, setas, hierbas aromáticas, granolas, proteínas tales como: pescado, res, pollo. No solo se utiliza para el consumo culinario, si no también para el inicio de la elaboración de aceites tales como de coco, aguacate, hueso de mamey…

Ventajas de usar un deshidrator

Las  grandes ventajas de deshidratar, son de preservar la vida de un producto más tiempo y apenas se pierden algunos nutrientes ( solo es significativa la pérdida de vitamina C.) y enzimas. Potencializa los sabores y así mismo permite obtener nuevas texturas al paladar. Reduce el desperdicio de alimentos ya que puedes extender su vida útil hasta 2 años. Y no tan solo eso, sino que al preparar la comida, verás calidad.

La deshidratación cambiará la forma que tienes de ver los alimentos. Las frutas y verduras simples se pueden transformar en deliciosas golosinas saludables.

Cuando pensamos en frutas secas, solemos asociarlo a “snack saludables” y muchas veces cuando nos ponemos a dieta consumimos grandes cantidades de frutas secas pensando que es una alternativa saludable a los dulces. Sin embargo, este no es el caso cuando se trata de frutas secas compradas en la tienda. Muchas de ellas contienen azúcares añadidos, dióxido de azufre y grasas trans, lo cual puede ser perjudicial para la salud. Así mismo podrás asegurarte de que todo el proceso es natural y no habrá la necesidad de añadir conservadores adicionales.

Al deshidratar, ocuparas menos de una sexta parte de su espacio de almacenamiento original y no requieren de una nevera o un congelador. Simplemente, empaqueta los alimentos limpios y secos en frascos para conservas, recipientes de plástico para congelar con tapas ajustadas, bolsas de plástico para congelar o bolsas de sellado al vacío (en porciones individuales).

¿Por qué un deshidratador y no un horno convencional?

Existe gente que por ahorrar en la compra de un deshidratador, utiliza el horno dejando la puerta entreabierta, pero el resultado no será el mismo, ya que la temperatura aún mínima de un horno es muy elevada para deshidratar. Además, de que el aire no circula como en un deshidratador.

Aunque los tiempos para deshidratar son largos, el deshidratador está muy lejos de consumir tanta energía como un horno convencional.