Deshidratador vs horno

El uso de un deshidratador

El deshidratador permite «cocinar» las preparaciones preservando los nutrientes y las enzimas de los alimentos.

¿Qué es un deshidratador y cómo funciona?

Los deshidratadores son aparatos eléctricos que funcionan con un ventilador, termostato y, algunos cuentan con temporizador. Gracias a la circulación de aire caliente, elimina la humedad o el contenido de agua en los alimentos. El agua es lo que hace que los alimentos se echen a perder o se deterioren, y sin agua, las bacterias y el moho no puede crecer.

Se pueden deshidratar todo tipo de alimentos: frutas, verduras, setas, hierbas aromáticas, granolas, proteínas tales como: pescado, res, pollo. No solo se utiliza para el consumo culinario, si no también para el inicio de la elaboración de aceites tales como de coco, aguacate, hueso de mamey…

Ventajas de usar un deshidrator

Las  grandes ventajas de deshidratar, son de preservar la vida de un producto más tiempo y apenas se pierden algunos nutrientes ( solo es significativa la pérdida de vitamina C.) y enzimas. Potencializa los sabores y así mismo permite obtener nuevas texturas al paladar. Reduce el desperdicio de alimentos ya que puedes extender su vida útil hasta 2 años. Y no tan solo eso, sino que al preparar la comida, verás calidad.

La deshidratación cambiará la forma que tienes de ver los alimentos. Las frutas y verduras simples se pueden transformar en deliciosas golosinas saludables.

Cuando pensamos en frutas secas, solemos asociarlo a “snack saludables” y muchas veces cuando nos ponemos a dieta consumimos grandes cantidades de frutas secas pensando que es una alternativa saludable a los dulces. Sin embargo, este no es el caso cuando se trata de frutas secas compradas en la tienda. Muchas de ellas contienen azúcares añadidos, dióxido de azufre y grasas trans, lo cual puede ser perjudicial para la salud. Así mismo podrás asegurarte de que todo el proceso es natural y no habrá la necesidad de añadir conservadores adicionales.

Al deshidratar, ocuparas menos de una sexta parte de su espacio de almacenamiento original y no requieren de una nevera o un congelador. Simplemente, empaqueta los alimentos limpios y secos en frascos para conservas, recipientes de plástico para congelar con tapas ajustadas, bolsas de plástico para congelar o bolsas de sellado al vacío (en porciones individuales).

¿Por qué un deshidratador y no un horno convencional?

Existe gente que por ahorrar en la compra de un deshidratador, utiliza el horno dejando la puerta entreabierta, pero el resultado no será el mismo, ya que la temperatura aún mínima de un horno es muy elevada para deshidratar. Además, de que el aire no circula como en un deshidratador.

Aunque los tiempos para deshidratar son largos, el deshidratador está muy lejos de consumir tanta energía como un horno convencional.